martes, 9 de mayo de 2023

PROTOCULO (VERSIÓN 2.0)

 



No es una errata. ¿Mal gusto? Quizás, pero desde luego a la misma altura que la enésima tomadura de  pelo de la Consejería de Desarrollo Educativo y FP. Es fruto de nuestra indignación.

Indignación, no puede haber otro sentimiento que ese. Las familias de la plataforma “Escuelas de Calor” consideramos una vergüenza que tras 6 años de arrancar nuestra lucha y poner el problema del calor en las aulas en la agenda política y de noticias de Andalucía, sigamos en la misma situación y los responsables políticos de la Junta de Andalucía se despachen con un "protocolo" para gestionar las altas temperaturas.

La Ley 1/2020, de 13 de julio, para la mejora de las condiciones térmicas  ambientales de los centros educativos andaluces mediante técnicas bioclimáticas y energías renovables, popularmente conocida como ley de Bioclimatización, lleva 3 años en vigor, pero la Junta de Andalucía de Moreno Bonilla (firmante de la ley aprobada por unanimidad en el Parlamento Andaluz) sigue sin aplicarla y se conforma con actualizar un protocolo ante las altas temperaturas en el ámbito educativo.

El protocolo en 2017 fue una medida de urgencia porque nada había y los equipos directivos tenían dificultades para tomar decisiones organizativas en los centros educativos, que eran verdaderas saunas incompatibles con la salud y el trabajo que se desarrolla en ellos. Aquello se gestó como respuesta a una "ola de calor", pero no son olas, es el clima de Andalucía y es el cambio climático. Y la Ley de Bioclimatización es la única respuesta ética y responsable con la salud de la comunidad educativa y con el planeta.

6 años después, cuando dicha ley en vigor tiene medidas para solucionar este problema en los colegios e institutos andaluces, que todo lo que se plantee hacer sea actualizar ese protocolo revela que la Junta de Andalucía no ha hecho los deberes. Lo menos que tenían que haber hecho es desarrollar reglamentariamente la ley para poder aplicarla y llevan 3 años sin hacer nada, excepto disfrazar de bioclimatización lo que no lo es en algunos centros.

Nos quieren hacer creer que están trabajando para resolver el problema de que las aulas sigan siendo saunas y los patios páramos sin sombra, pero no nos vamos a tragar ese insultante protocolo. No nos tomen por idiotas, no olvide que les vimos tramitar la ley y que sabemos que han pasado 3 años sin que hagan nada, porque esto requiere inversión y hacerla en la Pública no está entre sus prioridades. Este paripé de protocolo no les servirá para apaciguar nuestro enfado ni para desmovilizarnos. Ya son 6 años y llegadas a este punto no vamos a tirar la toalla. 

¿Acaso creen que las familias andaluzas no sabemos cómo vestir a nuestros/as hijos/as cuando hace calor? ¿Nos lo tiene que recomendar el protocolo? Que los pongamos a la sombra, ¿en qué sombra si en los patios no hay?¿En serio creen que el personal docente andaluz no sabe lidiar con las altas temperaturas y que tienen que darle "formación" para ello? Un personal docente y directivo de la Educación Pública que se echó a la espalda educar durante una pandemia, sin recursos, ¿necesita un curso online de 15 horas para lidiar con lo que llevan décadas padeciendo, la calor de Andalucía en sus centros de trabajo? Decididamente insultan nuestra inteligencia.

Y qué decir de la reducción del horario lectivo cuando haya alerta naranja o roja de la AEMET, por supuesto opcional y a criterio de equipos directivos y familias. Faltaría más. Otro parche que genera desigualdad entre alumnado (los que pueden ser recogidos a media mañana y los que no), caos en la impartición de las materias curriculares a lxs docentes (unos niños se van y otros se quedan en clase) y problemas de conciliación a las familias. ¿No lo han pensado, señora Patricia del Pozo?

Desde Escuelas de Calor mostramos nuestra más absoluta repulsa hacia el comportamiento irresponsable de la Junta de Andalucía respecto a este tema y exigimos que de una vez saque la ley del cajón y la aplique en los centros educativos andaluces. Ya no se trata de olas de calor, se trata de emergencia climática, se trata de que en marzo ya tenemos temperaturas de verano y que se van en noviembre. Y se trata de que el mínimo de cualquier gobernante es respetar las leyes y respetar a la ciudadanía, que en este caso son nuestros escolares -1´8 millones aproximadamente de menores, cuyo interés es superior a todo- y sus más de 200.000 docentes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario